36. Isaias 53

Fa(F)

1

Cual un renuevo en tierra seca Su hermosura el dolor eclipsó, Fue quebrantado y desechado, Entre los hombres el dolor lo agobió.

Coro

Fué quebrantado en un madero, Santo Cordero que muere por mí. En el Calvario El fué herido Para salvarme. ¡Admirable amor!

2

Nos escondimos de su presencia Menospreciado sin estimación. Llevó mis penas y enfermedades, Nuestros dolores con su muerte quitó.

3

El fué herido, mis rebeliones Allá sufriendo, Cristo las perdonó. El fué molido por mis pecados, Fue castigado por mi eterna paz.

4

El fué clavado en dura cruz, Y por sus llagas sanidad alcance. Todos nosotros nos descarriamos Como ovejas sin el dulce pastor.

5

El Dios Eterno cargó en su Hijo El vil pecado del mundo infiel. El fué angustiado y afligido: No abrió su boca, en silencio sufrió.

6

Como cordero fue llevado Al matadero donde el Expiro Humilde oveja que al sacrificio Fuiste llevado por mi, pecador. J.M.